21 ago 2009

Los bancos de Europa continental hacen una apuesta riesgosa

Por Stephen Fidler

LONDRES—Los bancos europeos continentales están siguiendo una estrategia muy distinta a la de sus pares en Estados Unidos y el Reino Unido para apuntalar sus finanzas. Para algunos analistas, sin embargo, se trata de una apuesta riesgosa a que pueden subsistir sin necesidad de acudir a los mercados bursátiles para levantar capital.

En los últimos meses, muchos bancos de Europa continental han reforzado su base de capital gracias a sus sólidas ganancias, mercados benignos, reducciones en sus dividendos y algunas ventas de activos.

No obstante, han sido menos activos que las entidades de EE.UU. y el Reino Unido en la recaudación de capital fresco a través de emisiones de acciones. En lo que va del año, los bancos del continente han captado US$11.600 millones en nuevo capital, frente a los US$48.300 millones en EE.UU. y US$26.000 millones en Gran Bretaña, según cifras de Dealogic.

Las cifras son bastante inferiores a los requisitos de capital de los bancos según cálculos de abril del Fondo Monetario Internacional. Las estimaciones sugieren que los bancos de Europa continental necesitarán recaudar unos US$375.000 millones para mantener su capital en un nivel saludable, frente a US$275.000 millones en el caso de los estadounidenses y US$125.000 millones en el de los británicos.

En el corto plazo, la renuencia de los bancos europeos a emitir acciones ha sido buena para los accionistas y el aumento en los niveles de capital podría reducir la presión por parte de los reguladores para actuar más rápido.

Sin embargo, aún persisten temores de que los bancos de la región, que han tardado más en reconocer las pérdidas por préstamos impagos que en EE.UU., podrían experimentar una erosión de su capital a medida que las pérdidas se acumulan. Eso, a su vez, podría limitar su capacidad para conceder préstamos y moderar las perspectivas de una recuperación económica en Europa.

Los bancos y los reguladores "cruzan los dedos y esperan lo mejor", dice un funcionario de una agencia internacional que sigue el tema de cerca.

Los bancos europeos enfrentan una presión desigual por parte de los reguladores de cada país para fortalecer su capital. En Suiza, las autoridades han insistido que UBS AG y Credit Suisse Group AG estén mejor capitalizados que sus rivales. La relación de capital Tier 1 de UBS, el barómetro de fortaleza financiera más seguido, era de 13,2% a fines del segundo trimestre. La de Credit Suisse era de 15,5%, lo que lo convierte en uno de los bancos mejor capitalizados de Europa.

En otros países, los esfuerzos de los bancos para levantar capital han sido menos agresivos, un hecho que los expertos atribuyen a la falta de presión de los reguladores. De todos modos, sus relaciones de capital han mejorado, en parte gracias a un auge en las ganancias de los negocios de banca de inversión. En Alemania, la relación Tier 1 de Deutsche Bank AG era de 11% a fines de junio, frente al 10,2% de los tres meses previos. La del italiano UniCredit Spa subió de 7,2% a 7,7%.

La renuencia de los bancos europeos continentales a acudir a los mercados bursátiles no sólo tiene que ver con el deseo de impedir que las participaciones de sus actuales accionistas se diluyan. Un problema, por ejemplo, podrían ser los temores de que aún no hayan dicho toda la verdad sobre sus pérdidas.

En EE.UU., las pruebas de resistencia realizadas por el gobierno han tranquilizado a los inversionistas, pero los reguladores en Europa se han negado a revelar los parámetros o los resultados de sus propias pruebas de resistencia.

"A diferencia de EE.UU., en Europa existen diferentes economías con sistemas bancarios en competencia y ningún gobierno quiere ser el primero en exponer sus bancos a las pruebas brutales que dejan al descubierto las deficiencias de sus instituciones", dice Johannes Wassenberge, un analista bancario de Moody's Investors Service.

[bancos]

Fuente: WSJ