24 sept 2009

La recuperación dependería de una reforma estructural china

Por Andrew Batson

BEIJING—Mientras líderes del G-20 trabajan para fraguar una recuperación global duradera, una ficha clave del rompecabezas será si la economía China puede concretar una demanda doméstica real y sostenida sin depender tanto del estímulo gubernamental.

China ya está implementando algunos cambios, como la reducción de nuevos préstamos bancarios y la eliminación de más barreras regulatorias al crecimiento económico. A los pequeños negocios que crean la mayor cantidad de nuevos empleos se les han prometido nuevas oportunidades. Pero esta nueva ruta será más difícil de gestionar con éxito comparado con el intento inicial de conseguir un mayor flujo de dinero.

Ese estímulo consiguió aumentar rápidamente el crecimiento: la mayoría de los analistas espera ahora que el gobierno cumpla su objetivo de crecer un 8% este año.

[China]

Pero tras inyectar grandes cantidades de crédito en la economía, más de US$1 billón (millón de millones) en lo que va de año, el gobierno de China debe asegurarse de que los inversionistas privados utilicen bien esos fondos. Estados Unidos y otros países también han instado a China a no reanudar su viejo patrón de crecimiento basado en la inversión y la exportación.

"Los diseñadores de políticas saben que se puede alcanzar un crecimiento del 8%, así que empiezan a pensar en reformas estructurales", dijo Lu Ting, economista para China de Bank of America-Merrill Lynch. "Si quieren que China crezca de manera más eficiente y más sostenible, deben lidiar con los intereses creados y deshacer los monopolios".

Sin dichos cambios, dijo, existe el riesgo de que un alud de nuevos préstamos bancarios acabe por financiar inversiones despilfarradoras que no harán mucho por fomentar el crecimiento. Los reguladores han tomado medidas para controlar los préstamos de corto plazo, que sumaron más de un tercio de los nuevos créditos durante el primer semestre, debido a temores de que parte de los fondos eran usados para especulación.

Funcionarios chinos están tratando de hallar un equilibro entre mantener la confianza en la recuperación y ajustar sus políticas a las nuevas condiciones. Han asegurado repetidamente al público chino que las políticas de estímulo se mantendrán. Pero el ritmo de los nuevos préstamos bancarios se ha reducido a 410.400 millones de yuanes (US$60.120 millones) en agosto, respecto a un promedio en el primer semestre del año de 1,2 billones de yuanes al mes (US$176.017 millones). El aumento del déficit presupuestario también se ha invertido de manera modesta en los últimos meses.

En comentarios públicos, los líderes chinos hablaron del futuro a largo plazo. "Nuestras políticas no deberían centrarse sólo en superar las dificultades de corto plazo, sino también, y de manera más importante, asegurar el desarrollo de largo plazo", dijo el Primer Ministro, Wen Jiabao, este mes.

En las últimas semanas, el gobierno de Wen ha anunciado reglas más liberales para el capital de riesgo, apoyo para sectores de servicios como el de tercerización, nuevos programas sociales para agricultores, así como alivios tributarios y una nueva junta bursátil para los pequeños negocios.

El gran papel que juega el estado chino en la economía podría poner coto a la nueva prioridad de otorgarles a las compañías del sector privado, no sólo a las entidades del gobierno, la capacidad y confianza de gastar de cara al futuro. El gobierno ya afronta críticas de que el estímulo ha desatendido a los pequeños negocios y el empleo.

"¿Cuál es el objetivo de un crecimiento del 8%? Es mantener el empleo. Pero si uno considera muchos proyectos de inversión concretos, descubrirá que no tienen mucha conexión con el empleo", dijo Tang Min, subsecretario general de la Fundación de Investigación de Desarrollo de China.

Para que las compañías privadas aumenten el empleo, también tienen que poder invertir en nuevas oportunidades empresariales. Pero muchos sectores lucrativos en China están dominados por empresas estatales. Las firmas privadas se quejan de que están siendo desplazadas de los sectores del acero, la minería del carbón y el transporte.

El gobierno ha dicho que planea reducir las barreras a la inversión privada en algunos sectores.

Fuente: WSJ